Texto: Santiago V. M.
Fotos: Gonzalo Valencia (Loxza)

El 24 y 25 de Julio se celebraba en La Campa de la Magdalena un festival llamado Santander Amstel Music. El evento no tiene nada que ver con el Santander Summer Festival aunque el nombre sea casi el mismo y del cartel repitieran varios artistas. Digo que no tiene nada que ver, en el sentido de que lo organiza otra empresa y este no era la continuación de aquel que puso en marcha Last Tour. La sensación que he tenido es de ver una especie de refrito del pasado, unos años después y con algún grupo de los que ahora están de moda. Cambio de Rostrio (La Virgen del Mar) por La Magdalena y una evaluación final que se queda en algo así como, buena organización, buena afluencia de público, un sitio inmejorable… pero un resultado en cuanto a los grupos un tanto descafeinado, sobre todo la primera jornada.

Porque sí, es un placer llegar a la campa de La Magdalena haciendo buen tiempo y tirarte en el prado mientras el sol te carga las baterías que aguantarán dos noches de música. No hay nada como esperar a los conciertos sentado en hierba con el mar al otro lado. Si la espera es amenizada por unos dj’s como Plastic Adict o Ramón y Cajal, te pueden caer los minutos encima que no importa esperar a qué hora se abrirá el telón de los conciertos.

El viernes comenzaron Cycle. Prácticamente repasaron su reciente “Sleepwalkers” de arriba a abajo. Concierto casi idéntico al que dieron hace quince días en el BBK live pero con el grupo y público menos entregado que en aquella ocasión. Abrir el fuego es siempre complicado, haciendo música de baile más, pero hubiese pasado lo mismo con cualquiera de los artistas.

Estereotypo tocaron en el escenario pequeño, ya son mucho más que un grupo que recorre la región con sus conciertos. Dieron el salto, ficharon por Astro y están tocando por toda España. En esta ocasión además de los “pepinos” de su primer trabajo presentaron temas nuevos. Necesito escucharlos más, en ese momento no me engancharon, no me pareció que superaran lo primero. Encima tuvieron problemas con el sonido. Aún así, a ratos, pudimos disfrutar de breves momentos de magia. No es el mejor concierto que les he visto.

Fangoria me pareció una mala copia de sí misma. Una sombra muy lejana de lo que yo conocía. La peor de las cuatro veces que la he visto. Un espectáculo soso, con muy poca parafernalia (normalmente es todo lo contrario) y bastante decepcionante para lo que esperaba. Los travestís han sido cambiados por bailarines, hay menos músicos y las canciones de “Absolutamente” están muy recientes todavía. “Ni tú ni nadie” de su época de Alaska y Dinarama y “No sé qué me das” fueron de lo poquito que emocionó.

Rinôçérôse divirtieron y cabrearon a partes iguales. Como espectáculo fue lo más fiero del festival, escenario, luces, proyecciones… Su mezcla de rock-disco-techno-house es ideal para fin de fiesta pero… abusaron del piloto automático, había demasiado playback. Que se grabe algo para apoyar a la música en directo vale, pero el otro día daba la sensación que lo “enlatado” tenía demasiado protagonismo. El caso es que ni ellos lo disimulan, ya no se sabía hasta dónde era un concierto o una representación. ¿Espectáculo sin más? ¿timo camuflado? Escuché varios comentarios del tipo “esto es como descubrir que los Reyes son los padres”. Pues eso.

El sábado 25 Lori Meyers daban en el centro de la diana del pop. Consiguieron un concierto razonablemente bueno para ser los primeros y con la paliza que debían llevar del viaje desde Extremadura. Sigo sin entender lo de las dos baterías haciendo casi lo mismo. El bajista había cambiado (desconozco si puntuamente). Se le veía muy contenido. Yo me quedo con lo antiguo, sobre todo el primer disco, el público se volcó con lo nuevo como con “Alta fidelidad”. El broche final con Vetusta Morla al completo y como doce personas llenando el escenario. Buenas sensaciones.

Band Dessine también se están haciendo un hueco entre los grupos relevantes de la región. Era la primera vez que les veía. Sonidos que me recordaban a la Velvet (no en vano tocaron I’m waiting for the man), Luna, The Auteurs, Bowie… buenas canciones que se fueron disipando conforme avanzaba el concierto y añadían elementos como la “corista”. No conseguí mantener la atención hasta el final.

Llegaron los Charlatans y llenaron de gloria toda la Magdalena. ¡Vaya grupazo! El mejor sonido de todo el festival, sin duda. Están envejeciendo muy dignamente… siguen dando conciertos notables y su último disco es de lo mejorcito. Tim Burgess llena el escenario el solito, lejos de histrionismos excesivos, saltos, carreras o bailes, Tim tiene un rollo entre tímido y simpático, con un encanto desganado, parece que se puede desvanecer a cada paso. No sabemos lo que oculta detrás de su sonrisa invertida, de sus muecas de máscara teatral, pero desprende cierta felicidad de seguir tocando. Según me comentaron entre ellos ni se hablan pero encima de las tablas no se nota. Cada uno a lo suyo pero con un resultado cojonudo. Historia de Manchester en “The only one I know” o “One to another” y nuevos hits en “You cross my path” (vaya comienzo), “Oh Vanity” (podrían ser New Order) o la maravillosa “This is the end”.

Vetusta Morla dieron un buen concierto. Sonó mil veces mejor que lo del BBK live (no era muy difícil por otra parte) y tocaron canciones nuevas y piezas ocultas en maquetas. Supongo que los fans lo agradecerían. El principio con “Autocrítica” ya me dio buenas vibraciones. “Al respirar” es un temazo en toda regla. “Saharabbey road” provoca el delirio colectivo, es muy difícil abstraerse de una marea humana en canto único y saltos sin fin. Es cierto que el tufo a grupos como Stone Roses y Radiohead no hay quien se lo quite, pero añaden un punto más latino. A mi hay cosas que me recuerdan a los Aterciopelados. Tengo curiosidad por saber cómo les va a ir en su siguiente paso al frente. Quiero ver si la gente que hoy los idolatra se olvidará de ellos cuando haya otros “Vetusta Morla”. No se cuanto durará el efecto Vetusta, no me atrevo a apostar. La gente es muy veleta con los grupos.

En fin, el Santander Amstel Music ha sido un buen intento con resultado desigual. Es un principio, ahora veremos si se perpetúa o queda en el sueño de dos noches de verano.