¡Qué alegría, qué alboroto! Qué bonita está la ciudad estos dias, con motivo de la celebración del día de la policia. Da gusto ir por la calle, y sentirse seguro. Poder pasear y ver furgones de la policía en cada esquina, exhibiciones con perros adiestrados, exposiciones… ¡cuán interesante!
Y no sólo eso, sino que ya puestos, los policías que pueblan nuestra bella ciudad no se limitan a exhibiciones inútiles y para el disfrute del pueblo. No. Aprovechan para mejorarnos la calidad de vida, nuestra seguridad y nuestra existencia, en general. ¿Cómo? De muchas formas, no se imaginan ustedes. No sólo es una bella estampa la de esos sufridos conductores cuyos vehículos son registrados minuciosamente mientras son vigilados con una de esas hermosas armas. No. Van más lejos aún. La policía se ha propuesto además, brindarnos un ocio sano y sin riesgos, y por ello ha iniciado una serie de redadas en locales de nuestra ciudad.