Esta noche The Saints en Los Picos (Liérganes)

The Saints, una leyenda del rock australianoMiércoles de Noviembre 22 de Noviembre
Los Picos Whisky Bar – Liérganes
Apertura de puertas: 21h – Concierto: 21:30 – Entrada única 14 Euros

Con un sonido alto, ruidoso y apasionado, The Saints estarán este próximo miercóles en la sala Los Picos para presentar su último trabajo (Imperious Delirium) y hacer un repaso obligado al resto de su dilatada carrera. Ya con su anterior trabajo, Nothing Is Straight In My House, rompían un silencio prolongado para ofrecernos una colección de temas realmente importante que hacía presagiar la vuelta en plena forma de uno de los combos más importantes e influyentes del rock australiano de las últimas décadas.

The Saints, junto a Radio Birdman son el eje sobre el que gira el rock australiano de mediados y finales de los 70. En 1976 The Saints autoeditaron I’m Stranded/No Time, adelantándose al New Rose de The Damned en Inglaterra y marcando el camino de posteriores bandas. En su trayectoria han dejado joyas como I´m Stranded o Eternally Yours. Liderados por el mítico Chris Bailey (a destacar su reciente dueto con Nick Cave en Bring It On), el combo se completa con dos espadas de lujo: Caspar Wijnberg al bajo, y Peter Wilkinson a la batería.

Chris Bailey cantando con Nick Cave en Bring It OnAtrás queda ese embrionario y genial I´m Stranded (1977) junto a Ed Kuepper y las innumerables comparaciones con grupos de punk rock de la época, a pesar de que sus guitarras siempre sonaron mucho más complejas y enredadas que las de la mayoría de ellos y de que combinaron influencias y estéticas del punk inglés y del americano.

Pertenecieron a la primera oleada del punk, recibiendo influencia directa de gente como Stooges (cuyo Fun House adoraban). En 1972 iniciaron su andadura, lo que ha hecho que sean muchos los que los consideren un precedente del punk; sin embargo, hay una distancia entre el estilo de bandas como Pistols o Damned y el sonido de The Saints, a ésto hay que añadir el giro estilístico tras el abandono de Ed Kuepper y lo más importante: su procedencia hacía que sus letras estuvieran más orientadas a la excitación juvenil que a la protesta social y política.